martes, 4 de febrero de 2014

Carta a todos los Chiclayanos



Lo que voy a escribir no es algo nuevo. No es novedoso. Lo he escuchado en muchas conversaciones en las que he podido participar. Sin embargo, ahora lo hago a raíz de una conversación telefónica con un buen amigo mío, Don Julio Castillo, Sociólogo de profesión el cual hoy se encuentra en la ciudad de Pucallpa haciendo consultoría respecto a temas sociales, me llamó y esta carta es la que sale producto del aprendizaje por teléfono.

Quiero confesar que la “Carta a los Precandidatos a la Alcaldía de Chiclayo” también fue producto de una amena conversación presencial con una señorita de elevado nivel intelectual, a quien yo quiero y aprecio.

¿Qué pasa en la ciudad de Chiclayo? O ¿Qué sucede con su gente?

La ciudad de Chiclayo se caracteriza por ser “La ciudad de la amistad”. ¿Vale el título? No. Ahora la ciudad es una ciudad conformista, sedentaria, observadora. Vuelvo a preguntar ¿Qué sucede con su gente?

La ciudad está destruida, producto de la corrupción e ineficiencia de las “autoridades”. Veo ahora mucho “líder”, han salido a las calles a protestar producto de que su calle ha sido destruida y su negocio cae en ventas, algunos sí, algunos no. ¿O sea, cuando el problema toca mi puerta me convierto en líder? ¿Y los demás problemas?

El interés, mi interés me mueve. ¿Y cuando pase el problema? Ahí los quiero ver.

La niñez, la adolescencia y la juventud brillan por su ausencia. Sus padres han contribuido a ello. La ciudad nos necesita. ¿Basta con publicar en el Facebook? ¿Basta tener presencia virtual? Además veo mucho líder virtual, eso le hace daño a la democracia participativa. Pero participemos con causa, no por impulso, vehemencia.

Un día vi una marcha convocada por uno locos que dicen ser ecologistas y de un partido político, el tema era contra la “Repartija” y sus pancartas decían “Conga no va” y demás temas. Es más, vi a muchachos que son manipulados subiéndose las rejas de la Catedral de la ciudad. Eso tampoco es justo y no pido una participación de ese tipo.

Siento mucho ruido, nada de propuesta, nada de alternativa. ¿O es que se quiere un protagonismo para luego lanzarme a algo? ¿O hago sentir mi voz para que me llamen a candidatear como regidor o consejero regional? Eso es lo que parece. ¿Alianzas? ¿Alianzas para qué? Para la ciudad no, para mi interés sí. Eso hay hoy en Chiclayo. Es como cuy en tómbola. Por ahí algo me tocará. Pues NO.

En los próximos días se realizará una marcha, están en todo su derecho. Pero esa marcha tiene un sentido de protagonismo. ¿Acaso las marchas o protestas son sólo una herramienta de democracia? Creo que hay límites de pensamiento y de política en general, que sólo quieren hacerse sentir para que me llame tal o cual partido. Eso no quiere Chiclayo.

Queremos madurez política, queremos experiencia, queremos honestidad, queremos transparencia, queremos decencia. ¿Utopía? No.

Escucho a mucha gente en la ciudad diciendo que no quieren saber de política, que la política es esto, el otro, aquello. ¿Y qué hago para que la política sea mejor? ¿Qué aporte haga a la causa?

En el caso de los candidatos y de los “nuevos líderes” ¿Dónde está su trayectoria? ¿Qué hice en el colegio, en mi comunidad, en la universidad? ¿A qué partidos políticos he pertenecido? ¿He sido, he querido o soy un pendejo de la política?

Hay muchos candidatos en la ciudad y de diversas ciencias. Un solo candidato de consenso y que este candidato reciba el aporte de los demás excandidatos y de sus disciplinas para una ciudad mejor. ¿Pido mucho? ¿Estoy loco? Loco por la ciudad sí. Loco por vivir en una mejor ciudad sí.

Reitero. LA UNIÓN HACE LA FUERZA, LA DESUNIÓN CONLLEVA AL CAOS.

PD: Tengo el nombre de tres personas que podrían ser excelentes candidatos. Mi irresponsabilidad se atreve a mencionarlos.

1. Nelly Cannata Rázuri
2. Amado Tiznado León
3. Julio Castillo

No hay comentarios:

Publicar un comentario